Un espacio de unidad de las construcciones de base

Desde la Corriente político sindical Rompiendo Cadenas -que integramos junto a compañeras y compañeros de otras organizaciones- estamos reuniéndonos con delegados, activistas y militantes de agrupaciones sindicales, discutiendo la coyuntura que atraviesa la CTA. Y sobre todo, la necesidad de avanzar en mayores niveles de unidad. El siguiente es la convocatoria base a estos encuentros, redactado a mediados de julio.

HACIA UN REAGRUPAMIENTO DEMOCRÁTICO Y DE CLASE EN LA CTA

Desde un conjunto de sindicatos de base, dirigentes, delegados, agrupaciones, y compañeros/as afiliados a la CTA queremos debatir nuestras posiciones en relación al rol que cumple y que debería cumplir la CTA, y en ese marco analizar también la perspectiva de una posición colectiva ante las próximas elecciones nacionales de esta Central.

Quienes suscribimos este llamamiento venimos, desde hace tiempo, actuando con posiciones y métodos de trabajo comunes: respeto a la democracia de base, a las asambleas y plenarios de delegados, intentando construir con amplitud y masividad una línea de defensa irrestricta de los derechos y necesidades de los trabajadores, con independencia de los Gobiernos y de las patronales en todos los casos, con una política que favorezca el desarrollo de construcciones sindicales democráticas, combativas y basadas en los principios de la clase trabajadora.

Consideramos que esta línea común de trabajo nos permite comenzar a acercar posiciones para trabajar en conjunto dentro de la CTA.

¿Qué está pasando en la dirección de la CTA?

Estas elecciones se dan en el marco de una crisis inédita en su dirección. Esta crisis pone en veredas enfrentadas a dos sectores que han transitado juntos distintos momentos de la lucha de clases en el país. Sintéticamente, podríamos decir que han coincido en poner a la CTA atrás de distintos proyectos burgueses en nuestro país (FREPASO, formación de la Alianza, principios del Gobierno kircherista). Las actuales diferencias vienen de una caracterización diferente respecto al rol que juega actualmente el Gobierno actual.

Los sectores hegemónicos de ambos proyectos hoy en disputa, la Lista Verde de ATE y la Lista Celeste de CTERA, son expresiones de un sindicalismo reformista y de conciliación de clases, que tiene una base real en una amplia franja de nuestra clase trabajadora. No son construcciones simplemente burocráticas basadas exclusivamente en la fuerza de sus aparatos y de la coerción sobre la base. Frente a los cuestionamientos y críticas por izquierda, no han dudado en recortar la democracia interna tanto en sus sindicatos como en la metodología de la propia CTA. El tipo de sindicalismo que expresan tiene objetivos parecidos, aunque hoy difieran en sus tácticas políticas. Conciben un sindicato fuerte integrado como una pata del poder, necesariamente reconocida por el Estado, en un gobierno de colaboración de clases, que intente sacarle concesiones al Gobierno de turno.

Entendemos que la construcción de una oposición clasista en la CTA no puede basarse solamente en ver cuanto más pedimos de salario, o cuantos días más de paro realizamos. Creemos que la independencia política de clase significa construir propuestas que, conteniendo y partiendo desde lo reivindicativo, se dirigen centralmente a un proyecto político que sea capaz de desmontar los mecanismos más profundos de la injusticia y la desigualdad en nuestra sociedad dotando a la clase de organizaciones en las que se pueda autodeterminar.

Desarrollar un bloque autónomo y clasista al interior de la CTA:

Un espacio que existe, pero que aún no está organizado

En los últimos años, se ha desarrollado en distintos lugares de nuestro país un conjunto de direcciones sindicales con método democráticos, y basados en posiciones de clase. En particular, este proceso se ha expresado con mayor relevancia al interior de la CTA. Estas direcciones provinciales, seccionales, juntas internas, delegados, no tienen todavía un ámbito común de debate, que permita un accionar colectivo posterior, respaldado por acuerdos concretos.

Entendemos que este espacio tiene posiciones metodológicas y políticas comunes, que se expresan en:

. Las prácticas profundamente democráticas son el nudo central por el que entendemos se puede ir construyendo desde la base un sindicalismo clasista y de masas.

. La independencia respecto del Estado, los patrones, los partidos políticos y la iglesia, es otra de nuestras premisas básicas. Entendemos que las organizaciones sindicales deben ser independientes de toda construcción externa, y que al mismo tiempo, esta independencia no significa aislamiento de las luchas reivindicativas y políticas que son necesarias.

Por eso luchamos por sindicatos que en todo el país respondan a condiciones pluralistas, democráticas a ultranza, en las cuales la organización y la decisión de la base son lo fundamental y que no disputan sus espacios de poder entregando las luchas ni integrándose al Estado o a construcciones políticas con los patrones. Organizaciones independientes de todo poder externo de la clase, y por eso mismo clasistas.

Queremos aportar desde estas organizaciones al carácter antiimperialista y anticapitalista de los procesos de cambio que se están dando en nuestro país y en América Latina, en la lucha por la construcción del poder popular.

Un Encuentro de organizaciones y trabajadores al interior de la CTA

En este sentido, creemos que es necesario un encuentro de debate fraternal para caracterizar amplia y colectivamente las elecciones de la Central y el modelo sindical hoy hegemónico en la CTA. Intentando alcanzar acuerdos de cara a estas elecciones, pero también sabiendo que más allá de las opciones tácticas que se evalúen, y que hasta puedan ser divergentes, quienes construimos todos los días con la perspectiva de la mayor democracia sindical tenemos que generar espacios para compartir caracterizaciones, reforzar confianzas, discutir cómo la estamos viendo desde ahora al 23 de septiembre y también más allá de esa instancia. Y en este sentido, proponernos un debate sobre los cambios que necesitamos para tener una central de trabajadores distinta. Cambios que expresen las ideas que animan nuestra militancia, tales como la apertura de espacios amplios de discusión sobre las problemáticas laborales y en general sobre el rumbo político del país, la elaboración de propuestas y planes de lucha en función de mandatos de base, la tolerancia a las ideas presentes en el conjunto del campo popular (en oposición a una lógica de macartismo muy presente en la conducción de la CTA), la representación de las minorías, y sobre todas las cosas, la no subordinación de la fuerza social construida a un proyecto ajeno a los intereses de la clase trabajadora.

Llamamos a construir juntos un canal de expresión de todos los sectores sindicales que vienen luchando por construcciones comunes a la que sostenemos. En la medida en que unifiquemos esta alternativa común que abarque a distintas direcciones sindicales y a agrupaciones, habremos dado un paso importante en el camino de construir la perspectiva política y las organizaciones que nuestra clase y nuestro pueblo necesitan.